A las 14:30 horas, en el hotel Nixe, con un día espléndido, bajo la presidencia de Queta Romaguera, se inicia el almuerzo, después de una copa de cava para celebrar este encuentro.
Asisten un total de 32 socios, lo que representa un 88’89 % del cómputo reglamentario. La mayoría vienen acompañados de sus cónyuges en un total de 23. Nos acompañan también
Pilar Mora, Ana Mª Parés, Marta Hugas, Pedro Comas y su esposa, María Gabriela y Kiko Nadal, Jordi Vives, y las hijas de Queta. Excusan su asistencia Margarita y Sebastián Cañellas, Pilar y Fernando Mulet, Maricarmen del Valle, y Renate y Günther Stoperan.
Queta da la bienvenida a todos los presentes agradeciendo su asistencia y tiene un recuerdo para Renate y Günther, que no ha podido asistir por su reciente operación quirúrgica, y especialmente recuerda a su amiga, y nuestra compañera, María José Pourtau, recientemente fallecida.
Por parte de la Presidente se obsequia a los presentes con un detalle navideño para las damas y caballeros.
Debido a lo especial de esta reunión no hay invocación, ni acta, ni efeméride, ni felicitaciones por onomásticas, ni turno de intervenciones, pero sí muy buen ambiente y un estupendo menú.
La presidente, en el momento de los postres, con una copa de cava toma la palabra para felicitarnos la Navidad y desearnos un feliz Año Nuevo. En unas breves, pero muy bien
llevadas palabras, nos compara lo que está siendo su presidencia con el mundo de la aviación.
No es lo mismo estar entre los pasajeros que pasar a pilotar el avión. Plan de vuelo cada semana, meteorología, emergencias, horarios, planificación de vuelos, cancelaciones, turbulencias, retrasos, etc. y además, en este caso, el piloto es una mujer. La experiencia del comandante se va adquiriendo con el tiempo y sale a relucir en el primer vuelo después de vencer los pequeños inconvenientes de la primera vez.
Queta agradece a los técnicos que la acompañan y a los pasajeros la tranquilidad que le transmiten y la ayuda para ejercer esta responsabilidad. Ahora ya navegamos muy altos, a una velocidad de crucero excelente en un vuelo muy apacible debiendo mantener el rumbo fijado y a lo lejos, todavía muy lejos, se empieza a vislumbrar las luces de la pista de aterrizaje.
Toma el mando la jefa de cabina, Isabel Bonet, auxiliada por los azafatos Carlos y José, y se reparten entre el personal unas hojas con un montón de preguntas que se deben responder para optar a los premios. Las más variadas y modernas técnicas del copieteo se activan con resultados altamente desastrosos si tenemos en cuenta la evaluación final.
Se han vendido con éxito unas papeletas para el sorteo de regalos con el objetivo de recoger fondos para los niños de la Asociación del Padre Montalvo.
Después de un ágil y simpático sorteo en el que ha habido muchos agraciados, incluso alguno repetido, terminamos este almuerzo de Navidad, con los mejores deseos para todos.
